Cuidado de tu Jabon Artesanal

Para alargar la vida de tu pastilla de Jabon es recomendable colocarla en un lugar fuera del agua y aierado. Utiliza una jabonera con rejilla preferiblemente de madera en la cual se pueda escurrir el agua.

Por que usar Jabon Hecho a Mano?

El jabon natural es la mezca de la ciencia y el arte, creados con recetas propias, y elaborados en pequeñas cantidades hace que cada pastilla de jabon sea saludable, especial y unica.
Entre los muchos beneficios que obtenemos con el uso de jabones naturales estan:

* Ayudan a mantener los aceites naturales de la piel.

* Hidratan a profundidad

* Dan a la piel mas suavidad y elasticidad.

* Son Antoxidantes y tónicos.

Otra razón no menos importante es que contienen un alto indice de glicerina natural la cual no se encuentra en los jabones industriales, ya que esta es separada del jabon y es utilizada o vendida por separado para crear otros productos. La glicerina tiene la propiedad de mantener la humedad de la piel, es por esta razon que los jabones industriales terminan resecando y maltratando la piel. Ademas en los jabones artesanales para su fabricacion usamos un exceso en aceites los cuales trabajan como complementarios y beneficiosos que contribuyen a hidratar aun mas la piel.

El Jabon Artesanal es una alternativa sana y eficaz para una nueva calidad de vida.

Arcilla Roja

Uno de los aditivos mas utilizados en la realizacion del jabon artesanal son las arcillas, este esta elaborado con arcilla roja.
Su color rojizo se debe a los elementos principales que la componen como son: el silicato de magnesio, el silicato de aluminio y oxidos e hidroxidos de hierro.

Entre los beneficios que la arcilla roja aporta a la piel son: que ayuda a combatir el acné, combate dolores musculares, proporciona un efecto astringente, combate la celulis, cicatriza heridas, problemas circulatorios, ayuda a combatir diferentes inflamaciones, etc.

Este maravilloso jabon hecho con la mezcla de los aceites base y arcilla en polvo es un verdadero lujo para el cuidado de nuestra piel.

Un Poco de Historia

En la historia del jabón se entrelazan a menudo la literatura y la leyenda. Ya en el siglo VI a.C, Homero narra en La Odisea cómo Naucasía, hija de Feacia, junto con sus sirvientas, pateaba en el agua del río la ropa sucia hasta dejarla completamente limpia. Así, a ese primer método detergente se le llamó "pie de doncella".

Otra leyenda cuenta que el jabón fue descubierto accidentalmente en Roma, por un grupo de mujeres que lavaba su ropa en el río a orillas del Monte Sapo. En dicho monte se efectuaban diversos sacrificios de animales, y los restos de grasa animal se mezclaban con ceniza y otros restos vegetales, que al llover eran arrastrados monte abajo. Dicha mezcla de grasa con ceniza acababa en el río, donde las lavanderas observaron que la ropa quedaba más limpia al frotarla con ella.

Pero dejando al margen estos mitos y leyendas, y centrándonos ahora en la parte histórica, hay indicios de que ya en la antigua Babilonia se usaba el jabón, y que también los sumerios y los hebreos lo conocían. Así mismo, los egipcios lo utilizaron tanto para lavar la ropa como para fines medicinales. En el siglo I d.C , el naturalista e historiador romano Plinio, nos habla en sus escritos de un jabón blando conocido por los antiguos pueblos germanos, y otro jabón más duro utilizado por los galos. También en el siglo II d.C., el médico romano Galeno nos facilitó las primeras noticias sobre el empleo del jabón como medio curativo, así como para la fácil eliminación de la suciedad del cuerpo y de los vestidos.

La fórmula más antigua conocida del jabón, data aproximadamente del 2250 a.C., pero fue en el siglo VII y precisamente en la ciudad italiana de Savona (a la cual debe su nombre) donde se empezó a elaborar un jabón a base de aceite de oliva, que también se hacía en España y era conocido como "Jabón de Castilla". La industria jabonera floreció en las ciudades costeras del Mediterráneo, favorecidas por la abundante presencia del aceite de oliva y la sosa natural, procedente de las cenizas de las algas marinas. En el siglo XV aparece también el conocido "Jabón de Marsella", preparado con una mezcla de huesos (ricos en potasio) y grasas vegetales. En el siglo XVI el jabón era extremadamente caro, por lo que su uso no estaba muy difundido. Es por ellos que no fue realmente hasta el siglo XIX, cuando se expandió el uso del jabón a lo largo de Europa y el resto del mundo.

Desde entonces hasta ahora, lo que ha evolucionado más en el mundo del jabón no ha sido tanto su formulación como su apariencia. Así, los jabones han pasado de su antiguo tacto rudo y aspecto poco agradable (no olvidemos que seguían elaborándose con grasas animales impuras y ceniza), a la cuidada presencia del jabón industrial que conocemos actualmente, o las vistosas presentaciones de los jabones artesanales de hoy en día.

Manzanilla

Gracias a muchas de las propiedades que posee esta planta, es muy utilizada para usos cosmeticos ya que trabaja sobre la piel como un calmante natural, ayuda a aliviar las inflamaciones, quemaduras solares e irritaciones, dejando la piel suave.

Hecho con Infusion de manzanilla, aceite de oliva extravirgen, aceite de coco, aceite de ricino, manteca de cacao, aceite de almendras, aceite de soya, y Vitamina E., es un jabon ideal para la ducha de la noche, porque mantiene la piel relajada para un buen y merecido descanso.

Decorado con flores secas de manzanilla.

Jabon de Avena

Hecho especialmente para las pieles delicadas o sencibles, por ser un limpiador natural la avena tiene un elevado poder hidratante y emoliente , ademas un suave exfoliante ideal para equilibrar este tipo de piel.

Ingredientes: Avena en polvo, copos de avena, aceite de oliva extravirgen, aceite de ricino, aceite de coco, aceite de soya, aceite de almendras, enriquecido con vitamina E, y aceite de germen de trigo. Sin colorontes ni aromas artificiales.